martes, 27 de octubre de 2015

Sardinas rellenas



Lo único constante es el cambio.
Heráclito de Éfeso, 500 a.c. 

Esta cita rige mi vida cuando se trata de preparar menús. Basta que haya encontrado unas cuantas recetas del gusto de todos, nutritivas, sanas y fáciles de hacer, para que alguno de mis retoños diga que se ha cansado del plato en cuestión. Así que vuelvo a buscar recetas con nuevas formas de cocinar los mismos ingredientes o a probar nuevos ingredientes. Porque ahora el pollo no le gusta a la mayor ni la ternera al pequeño. Con el pescado no se ponen de acuerdo y yo no puede comer verdura a todas horas aunque ellos sí.

Todo esto para explicar cómo llegue a cocinar unas sardinas rellenas  como las de La cocina de Lechuza que han sido un éxito!

Ingredientes

Sardinas limpias sin espinas
Jamón o bacon en lonchas
Cebolla
Pimientos del piquillo
Patatas
Pan rallado
Sal, pimienta


Se limpian las sardinas como las anchoas, sin la espina central y abiertas. Se pocha cebolla picada muy fina. Una vez pochada se añade unos cuantos pimientos de piquillo también picado finamente. En otra sartén se fríen las patatas cortada en lonchas como para patatas panaderas. Una vez que estén ligeramente hechas (se terminan de hacer en el horno), se monta la fuente.
Se coloca en la base de una fuente para horno una cama de las patatas, encima se coloca las sardinas con la piel hacia abajo. encima de cada sardina se coloca una cucharada del sofrito de cebolla y pimiento, encima una loncha de jamón y otra sardina con la piel hacia arriba. Las sardinas hay que salarlas poco porque el sofrito y el jamón ya llevan sal. Se espolvorea con pan rallado (opcional) y se echa un hilillo de aceite por encima. Se mete al horno precalentado a 180º durante unos 15 minutillos o hasta que queden doraditas.

Mas o menos os quedará esto o mas bonito!!



El plato admite muchas variaciones a gusto del consumidor. Se puede rellenar con una fritada de verduras, un revuelto de algo que guste en casa, sin patatas para que sea más rápido, usando anchoas.... Mientras se calienta el horno, se hace el relleno. Lo mas complicado es limpiar el pescado! Pero soluciona una cena o un segundo plato. 

Y lo mejor de todo, les gusta a la niña y al niño!!!! Aleluya!!! Ya veremos hasta cuándo...


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